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El test MBTI: claves para el desarrollo profesional y personal
16 de mayo de 2024
Emprender es un camino lleno de incertidumbres. Por eso, contar con un guía experimentado que te acompañe en el proceso es una ventaja y un gran empujón hacia el éxito. De hecho, las estadísticas confirman que el 70% de los emprendedores que tienen la guía de un mentor o mentora sobreviven el doble de tiempo que aquellos que no cuentan con uno.
El mentoring es una práctica que lleva aplicándose siglos. Por ejemplo, ya en la Antigua Grecia, los filósofos usaban esta técnica. Sin ir más lejos, Sócrates fue el mentor de Platón. En el contexto del emprendimiento, este concepto habla de un mentor como una persona que tiene una gran experiencia en el mundo empresarial y que guía a los menos experimentados a través de sus propias experiencias, conocimientos y errores.
Ambas prácticas se centran impulsar el desarrollo del capital humano. Por un lado, el coaching es un proceso de entrenamiento y desarrollo personal en el que un coach trabaja con el objetivo de ayudar a alcanzar metas, mejorar el desempeño y desarrollar el potencial.
El mentoring, por el otro lado, es un proceso de tutoría en el que una persona con experiencia y conocimientos en una determinada área le da a su mentee orientación, apoyo y consejos.
Aunque en un primer vistazo, el coaching y el mentoring parezcan lo mismo, existen diferencias clave en ambas prácticas:
Mientras que el coaching se enfoca principalmente en el desarrollo de habilidades y capacidades específicas, el mentoring se centra en la transferencia de conocimientos en base a la experiencia del mentor.
La relación entre el coach y el coachee es igualitaria. El coach se encarga de brindar apoyo y guía, pero el cliente es quien toma las decisiones. Sin embargo, en el mentoring, la relación es más jerárquica, ya que el mentor asume un rol de tutor. Además, la duración del coaching suele ser más limitada y breve. Tiene sesiones planificadas en el tiempo y un enfoque más centrado en objetivos a corto plazo. Pero, en el mentoring, la relación suele ser más larga y continua, pues el mentor ofrece un apoyo constante al emprendedor desde los inicios de su proyecto y a lo largo de su desarrollo.
La principal ventaja del mentoring es acelerar el crecimiento del negocio y minimizar la posibilidad de cometer errores. Pero, las ventajas de aplicar esta práctica a un emprendimiento son más, tanto en el plano profesional como en el personal:
El éxito en una relación de mentoría depende de muchas variables, pero una de las claves principales es la compatibilidad entre el mentor y el mentee. ¿Cómo podemos asegurarnos de encontrar y seleccionar a un mentor que se alinee con nuestras necesidades y objetivos?
Un mentor debe reunir varias características para asegurarnos encontrar un perfil que pueda ayudarnos a desarrollar nuestra trayectoria profesional y nuestro emprendimiento: