Los beneficios de la semana laboral de cuatro días

A finales de 2022, una prueba piloto en Reino Unido con más de 70 empresas cambió las perspectivas del futuro laboral. Este ensayo, el mayor realizado hasta entonces, convocó a más de 3.300 empleados para que cambiaran su jornada de trabajo a cuatro días, sin reducir su sueldo. Y funcionó. Tras publicarse los resultados, avalados y coordinados por instituciones tan prestigiosas como la Universidad de Cambridge, Oxford y el Boston College, se vaticinaron los mejores pronósticos. Ahora, este modelo ha comenzado a exportarse al resto de países occidentales para comprobar su efectividad.

En España, esta reducción semanal llegó dos años antes, en enero de 2020. La empresa pionera en probar este nuevo calendario fue DELSOL, una compañía de software andaluza. “Todo comenzó cuando le preguntamos a nuestra plantilla a través de una encuesta qué es lo que más valoran para trabajar dentro de una empresa. La gran mayoría respondió la conciliación para tener tiempo libre y estar en familia. Así que nos pusimos manos a la obra”, comenta Ana Arroyo, la Responsable de Selección y Desarrollo de Personas de la compañía.

El camino hacia este nuevo esquema es todavía difuso. Pero lo que sí se sabe con certeza es que no se entiende sin aplicar el teletrabajo. Una opción que llegó con fuerza tras la pandemia y que parece haber venido para quedarse. En los últimos años, la sociedad asiste a ritmos vertiginosos a nuevos cambios y retos a los que hay que dar respuesta. Ya no solo por las consecuencias marcadas por crisis económicas, pandemias, guerras, inflaciones y un futuro lleno de incertidumbre, sino también por las propias necesidades de la población. 

Y es que las nuevas generaciones ya no conciben el trabajo como la única alternativa para sentirse autorrealizado. Atrás quedaron los pensamientos de “trabaja en lo que te gusta y no tendrás que trabajar nunca más en la vida”.  Esto ha traído modificaciones en la organización tradicional del mercado laboral, con nuevos empleos alejados de lo convencional, independientes y con ingresos inferiores a los de generaciones anteriores.

¿Qué supone impulsar una jornada laboral de 4 días? 

 

Según los resultados extraídos por las numerosas pruebas piloto impuestas en varios países europeos, los beneficios de este nuevo modelo de organización son múltiples: 

Mayor productividad: “Un trabajador feliz es muchísimo más productivo y por ende siempre hará crecer a la empresa”, comenta Arroyo.

Menos estrés y enfermedades: “Hemos visto que la reducción de la semana ha disminuido el absentismo por salud en la empresa. Entre esto y el teletrabajo notamos muchas menos bajas, porque la gente se planifica mejor”, argumenta.

Mejor clima laboral: “También hemos visto cómo ha mejorado el compañerismo y por tanto el clima de trabajo”. 

Aumento del empleo: La semana laboral de cuatro días supone un aumento del número de empleados, pero según DELSOL, esto se traduce en una reinversión. “Tuvimos que aumentar un 25% la plantilla para poder llegar a los turnos de rotaciones. Permanecemos abiertos los cinco días, pero nuestra filosofía es que siempre se trabajen cuatro”, explica la responsable de RRHH de Delsol. Ahorro de energía: se reducen los gastos de luz, transporte y gasolina. Y por lo tanto se reduciría la contaminación en las ciudades. 

Ahorro de energía: se reducen los gastos de luz, transporte y gasolina. Y por lo tanto se reduciría la contaminación en las ciudades. 

Peones de un tablero ajedrez.

MBA

El programa combina un enfoque internacional y multidisciplinar, con el desarrollo de habilidades esenciales para el éxito, así como herramientas de autoevaluación y planificación de tu proyecto de vida profesional y tus metas.

Más información

Entre sus retos, los más destacados han sido los siguientes:  

 

  • Gran inversión: Mantener el mismo sueldo es quizá uno de los asuntos más importantes. Más que un inconveniente, es un factor a alcanzar.  Trabajar menos horas (32 en lugar de 40) manteniendo el mismo salario ha sido todo un reto, pero como explica la responsable de RRHH de Delsol, esta decisión debe venir marcada por la empresa: “En Delsol hicimos un gran desembolso, pero creemos que fue una inversión para el futuro. No hemos notado ningún empeoramiento, al contrario, facturamos más. Por eso no vamos a dar marcha atrás. Pero insisto, es un gran desembolso y puede no funcionar para otras empresas” No hay un modelo único aplicable a todos los sectores, ya que dependerá del tipo de empresa y su remuneración correspondiente. “No todas las compañías se pueden permitir pagar los mismos sueldos por menos horas”,  concluye.  

  • Sectores con más complicaciones: Un punto que va en línea con el anterior. La hostelería, la sanidad y la educación son más sensibles a tener mayores complicaciones para poder llevar a cabo la reducción semanal. 

  • Mayor carga de trabajo: Los empleados que sufran una carga de trabajo desproporcionada deberán asumir ese mismo trabajo en menos horas. Algo que podría repercutir en mayores riesgos de sufrir estrés o ansiedad. 

  • Una medida todavía por definir para todos: El Boletín Oficial del Estado (BOE) en España publicó el pasado mes de febrero la puesta en marcha de un programa piloto para que un total de 70 de pymes pueda poner en marcha la reducción. La medida, lanzada por el Ministerio de Industria, cuenta con una inversión de 150.000 euros y estará vigente durante dos años para probar su efectividad. Hasta entonces, todo apunta a que habrá que seguir esperando para que exista un marco común que lo regule para todos. 

Contenido Relacionado